¿Cultura, qué es eso?
Santos Diamantino
Cuando
pienso en la palabra cultura, me viene a la cabeza reglas, normas, estrategias,
creencias, ideas, mitos, y esto seguro le pasa a cada humano, ya que estos
saberes regulan la existencia del ser humano. Ahora, cada cultura es singular
en su forma de ser, lo que hace que hablemos de culturas, de diversidad
cultural, mismos que gozan de un manejo de símbolos, signos y significados. Considero
importante identificar estos aspectos desde distintos ámbitos del conocimiento
como la antropología, arqueología, política, sociología, arte, etc. aunque en
este espacio esto no es posible. Pero tratare de comentar en pocas palabras lo
que pienso sobre esta palabra.
La
palabra cultura es algo extraño (cuando se la piensa) y familiar (cuando se la
oye en televisión, radio, universidad, institutos, etc.) a la vez, es conocida
pero abstracta cuando se quiere saber su significado. Algunos dicen que cultura
es todo, otros que tienen sus particularidades, otros simplemente piensan que
cultura es bailar o cantar, algunas la ligan con hacer arte, y así hay
distintos puntos de vista. El punto es que este concepto es difícil de precisar
por su característica.
Para
mi cultura es aquel referente de transmisión biocultural que se hace de generación
en generación, tanto en lo material como en lo espiritual. El objetivo de este
referente es orientar al ser humano en su caminar tanto individual como
colectivamente, ya sea en su lengua, en su proceso de aprendizaje, en sus
costumbres, valores y conocimientos sobre su entorno (hablo de esa triada
espiritual que se da en el ande; la naturaleza, los animales y el ser humano). Si
se piensa de esta manera (homonatura, biocultura), el sistema cultural le garantiza
la supervivencia al ser humano, además de facilitarle elementos de adaptación a
otras realidades y cosmovisiones.
Pero
también existe intelectuales como Henry Pratt F. que dice que cultura es todo
aquello que no es naturaleza, esto visto desde la lógica occidental, Henry
Pratt F. en 1994 había afirmado que “cultura
es el nombre común para designar todos los tipos
de conducta socialmente adquiridos y que se transmiten con igual carácter
por medio de símbolos”, dando a entender que el ser humano es un producto
de la sociedad.
Si
todo lo adquirido es cultura; el alfabeto al igual que la música es cultura, un
libro al igual que una matanza es cultura, el descubrimiento científico como el
desarrollo de la bomba atómica es cultura. Si vemos a la cultura igual que Henry
Pratt F. estamos planteando un concepto sin salida a la reflexión ética.
Actualmente leo y oigo comentar sobre eso que viene a ser “comentarios urbanos”
(desde mi apreciación), quienes toman a la cultura en sus diferentes aristas
como ser cultura de la violencia, cultura de la corrupción, cultura del crimen,
cultura del narcotráfico, cultura de la mariguana, afirmando que esto “no se
trata de estilos sino de cultura”. Yo me pregunto ¿Qué tendrá de cultural estas
formas de vida? ¿Será que el concepto de cultura retoma la reflexión ética? Lo
peligroso está en que se ha hecho normal eso que llaman cultura. Si nos
oponemos, nos responden de que estas forman parte de las creaciones sociales
del ser humano por lo tanto es cultura.
Considero
que todo esto a generado una saturación del termino cultura, reduciéndose a la
actividad que uno cumple, sin importar si es folklore, cine, gastronomía,
festival, literatura, juegos de antaño, etc., el punto es que este lleve un
membrete que diga cultura.
Comparto
la idea de que la cultura es un mecanismo de creación y producción de formas
simbólicas. Pero estas necesitan ser reconocidas por la sociedad (por su
positividad), lo que da lugar a la institucionalización cultural, es decir, al
reconocimiento legal de un fenómeno, o el reconocimiento tácito
“consuetudinario”. Por ejemplo el teatro, la música, el deporte, la historia,
la justicia, la iglesia, las universidades, el museo son mecanismos que
garantizan el reconocimiento de las culturas, es como aquel elemento que las
equilibra.
De
ahí que se habla de cultura organizacional, el cual se basa en la ayuda a otras
personas. Desde la antropología cultural, se habla de la cultura inmaterial o
patrimonio inmaterial que básicamente hace alusión a la transmisión oral, de
creencias, valores, sabiduría, técnicas artesanales, prácticas religiosas, el
lenguaje, la música, las leyes, vestimenta, tradiciones o expresiones vivas que
se han heredado y transmitido a generaciones venideras.
El
aporte antropológico es que mediante la etnografía se fortalece el pensamiento
diverso, el dialogo intercultural, se promueve el respeto, además de trabajar
en el registro de planes de salvaguardia, instrumento que sirve para guiar una
manifestación cultural, misma que es producto de un acuerdo entre lo social y
la administración pública. En este intento de querer institucionalizar existe
lo que se llama patrimonio material y tangible, donde están ciencias como la
arquitectura, artes, arqueología, manifestaciones como la vestimenta, cocina,
armas, etc.
Como
dije al inicio de este escrito toda cultura al ser diversa se caracteriza por
compartir una serie de elementos, como prácticas humanas, conocimiento, visión
del mundo, expresión simbólica, tradiciones, dinámicas de transformación. Pero
para que haya utilidad la misma debe ser tomado desde distintas categorías para
su revalorización, más aún cuando se trata de institucionalizar; ahí tendrá que
verse el tema de la historia cultural, el paradigma cultural, su escritura o
cultura oral, su clase social, económica, el orden material, la cultura de
consumo, la cibercultura, o lo que se denomina subcultura o contracultura.
El punto
es que para trabajar desde la cultura elemental es organizarse, generar estrategias,
desarrollar planes estratégicos, métodos, realizar marcos normativos, pilares ideológicos
más que políticos, diagnósticos, análisis micro y macro contextual, darle una visión
y misión a esa cultura organizacional. Para que esa transmisión biocultural que
se hace de generación en generación tenga frutos, reoriente a la humanidad en
sus objetivos sin dejar de lado esa triada espiritual naturaleza, animal y
humanidad. Una organización que tenga metas claras, que promueva valores
culturales, que fomente a la empresa cultural, a la proactividad, a buscar y
generar identidad (imagen y coherencia ideológica).
https://drive.google.com/file/d/1A-dEj9uxm_TxeBqI8A1eslaQKKVaCh30/view
Me hace pensar si la cultura hace al hombre o el hombre a la cultura.
ResponderEliminarMuy lindo escrito.
Saludos!
Muchos consideran que el hombre es producto de la sociedad por tanto de su cultura. Pero considero que una cultura (creaciones simbolicas, signos y otras manifestaciones) necesita del ser humano para su existencia, tal ves asumo lo que el sofista Protagoras asumía como principio de que el hombre es la medida de las cosas, el peligro esta en ingresar al plano de la relatividad cultural. No obstante, tambien soy consciente de eso que en las ciencias sociales se llama Diversidad cultural
EliminarEl primer comentario lo entiendo en que es lo primero el huevo o la gallina... Interesante reflexión Santos... Estuve revisando material de España e Italia, ahí se habla de la integralidad del Patrimonio bajo un enfoque de desarrollo endógeno...
ResponderEliminarEl primer comentario lo entiendo en que es lo primero el huevo o la gallina... Interesante reflexión Santos... Estuve revisando material de España e Italia, ahí se habla de la integralidad del Patrimonio bajo un enfoque de desarrollo endógeno...
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